Discreta, laboriosa, a 102 anni prepara ancora la salsa di pomodoro in barattoli, quelle fatte in casa come un tempo.
LA STORIA
MENDOZA (República Argentina) – Gran fiesta familiar para la abuela Lucrezia Del Monaco. Valeri quien hoy celebró 102 años de vida. Pastel, hijos, nietos y bisnietos le han dado el honor que merece esta mujer dotada de una inmensa bondad.
Y desde su Carsoli donde nació como hoy 13 de mayo de 1922 llegan los más queridos deseos virtuales de todos sus nietos y familiares que llegan a Mendoza en Argentina donde vive desde que se mudó allí desde muy joven con su esposo y sus tres hijos.
Discreta, trabajadora, a sus 102 años todavía prepara salsa de tomate en tarros, casera como antaño.
Una historia, la de Lucrezia, como la de muchas personas que en tiempos de guerra se vieron obligadas a abandonar su tierra natal para encontrar mejores condiciones de vida y garantizar un futuro mejor para sus hijos. Eran tiempos de posguerra, en Carsoli los signos de destrucción aún estaban intactos y no se vislumbraban grandes intervenciones. Escombros, polvo, casas destruidas. Y hizo falta mucho coraje para abandonar el lugar de origen y trasladarse a otro lugar con tres hijos. La elección fue Argentina, tierra que acogió a muchos italianos en aquel difícil período.
HISTORIA
Lucrezia Del Monaco se casó con un tal Enzo Valeri, también de Carsoli, y los dos, que tuvieron los dos primeros hijos nacidos en Carsoli, en plena Segunda Guerra Mundial, con gran valentía hicieron el cruce histórico para muchos.
Se casaron el 30 de octubre de 1941 y en 1948 Lucrecia esperaba su tercer hijo, que entonces nació en Argentina. El barco que llevó a esta familia a tierra extranjera fue el “Ugolino Vivaldi”, y fueron dieciocho días de navegación. El 3 de mayo de 1948 cuando se produjo el desembarco en Mendoza. Desde entonces Lucrezia permaneció permanentemente en este lugar que luego le dio 11 nietos y 26 bisnietos que la rodean con mucho cariño junto a sus queridos hijos, Gianni, Pierino y Norma.
Sin embargo, siempre permaneció vivo en ella el recuerdo de su Carsoli, (a quien abandonó cuando tenía diecinueve años) y de sus hermanos, el fallecido Fernando (conocido como Naico) y Eugenia, con quienes siempre mantuvo contacto epistolar.
Regresó a Carsoli varias veces durante su vida y sus visitas transcurrieron siempre con gran emoción.
Felix cumple!